DON VALENTIN OYARVIDE BERASATEGUI, SECRETARIO DEL EXCELENTISIMO AYUNTAMIENTO DE ESTA CIUDAD DE FUENTERRABIA, CERTIFICO: Que el tenor literal del acta de la sesión extraordinaria celebrada el dla doce de octubre de mil novecientos cincuenta y uno, copiada a la letra, es el siguiente:
«La Alcaldla presidencia maniflesta a sus compañeros de Corporación que, recogiendo el sentir de los diversos núcleos de opinión en los que se encuentran integrados los valores representativos de todas las clases sociales de la ciudad, tiene el honor de someter a su conocimiento y consideración, dando estado oficial a la buena nueva hoy difundida no sólo en la población, sino en toda la provincia de Guipúzcoa, de los nobilísimos anhelos de la Comunidad de los Reverendos Padres Benedictinos, de regentar el Santuario de Nuestra Señora la Virgen de Guadalupe, convirtiéndolo a tal fín, en Abadía Benedictina para mayor gloria de nuestra amantísima Madre y orgullo del pueblo de Fuenterrabía, de tan arraigada fe mariana a través de los siglos y, muy singularmente, a raíz del triunfo ante el extranjero invasor en el Sitio que sufrió la ciudad el año 1638, en cuya epopeya la Santísima Virgen fué la Capitana, norte y gula, que con su intercesión hizo que las armas españolas escribieran una de las páginas más gloriosas de la historia patria.
«Informada debidamente esta Presidencia, puede confirmar al Concejo, con verdadero gozo, los deseos de la Comunidad Benedictina, hasta el extremo de que ha sido presentado un respetuoso escrito al Excelentísimo y Reverendlsimo señor Obispo de la Diócesis. La ocupación del Santuario y el ejercicio del culto mariano con el esplendor propio de la Orden Benedictina, dentro del magníflco continente de una nueva Abadía, seria un galardón más que añadir a la rica ejecutoria que ostenta la histórica ciudad de Fuenterrabla. «Por lo expuesto, propongo en esta fecha solemnísima de la festividad de la Virgen del Pilar, que conste en acta la satisfacción de la Corporación, que ha recibido con júbilo tan señalada noticia, acordando asimismo adherirse con el mayor entusiasmo a los deseos de la Comunidad Benedictina, dirigiendo un respetuoso escrito al Excelentísimo y Reverendísimo señor Obispo de la Diócesis, en súplica de que se conceda a la Orden Benedictina la ocupación y regencia de! Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, seguros que con ello se interpretan los sentimientos de todo e! vecindario de Fuenterrabía.
«El Concejo por aclamación hizo suyas las manifestaciones de la Presidencia, elevándolas a acuerdo».
Concuerda flelmente con el acuerdo a que me remito. Y para que conste, expido el presente, visado por el señor Alcalde, en Fuenterrabía, a dos de jullo de mil novecientos cincuenta y dos.